 
        Un nuevo día de etapa – Comienzo y ambiente
La mañana en Olveiroa amanece entre la niebla. Entre los antiguos hórreos se filtra la primera luz, y el aliento de las vacas se eleva en vapor sobre los prados. Todo está en silencio, solo el golpeteo de los bastones resuena sobre el empedrado.
Hoy caminas hacia el norte —no hacia el “fin del mundo”, sino hacia un lugar donde el mar y las rocas cuentan una historia silenciosa: Muxía, donde las olas golpean las piedras y el aire huele a sal y a viento.
A la salida del pueblo el Camino se divide. La piedra con las dos conchas se alza como un guardián silencioso al borde del sendero. Giras a la izquierda: el camino hacia Muxía. El sendero desciende hacia el valle del Río Xallas. La niebla queda atrás; el silencio te acompaña.
Distancia y perfil de la etapa
- Distancia: aprox. 31 km
- Desnivel: +510 m / –610 m
- Dificultad: media
- Duración: 7–8 horas
- Carácter: colinas suaves, caminos rurales y forestales, aldeas tranquilas, y al final, la aproximación a la costa
Esta etapa te lleva desde el interior de Galicia hasta la Costa da Morte. Es un camino menos conocido que el de Fisterra, pero no menos impresionante: una ruta para quienes desean sentir el Camino un poco más, dejar que se prolongue un paso más allá.









Descripción del camino – con todos los sentidos
Abandonas Olveiroa en las primeras horas de la mañana, cruzas el arroyo y asciendes suavemente. Después de aproximadamente un kilómetro llegas a Hospital, donde las rutas se separan: a la derecha hacia Fisterra, a la izquierda hacia Muxía. Sigues la concha de la izquierda.
El camino avanza por tranquilas carreteras rurales y senderos de campo a través de Senande y Casais. El paisaje se abre: campos, prados, viento. Un murmullo suave de agua te acompaña.
Tras unos diez kilómetros llegas a Dumbría. Un pequeño bar, una tienda, un cajero automático: una breve parada para recuperar fuerzas. Desde aquí, el Camino continúa por terreno abierto, pasando junto a casas aisladas y pequeños arroyos.
La ruta asciende ligeramente por Trasufre y Senande, y luego continúa por colinas suaves hasta Quintáns (aprox. km 21). Allí se alza una pequeña iglesia que en verano ofrece sombra. La carretera AC-552 se cruza varias veces: aquí conviene prestar atención.
Después el camino atraviesa Buiturón y más adelante Moraime, donde se encuentra una iglesia románica con un atrio tranquilo. Desde allí solo quedan dos kilómetros hasta Muxía.
El descenso es llano; el mar se anuncia poco a poco: primero en el viento, luego en el olor, por último en la luz. Muxía aparece ante ti – un lugar blanco entre rocas y olas. El Camino sigue hasta el Santuario da Virxe da Barca, sobre los granitores peñascos que miran al Atlántico.
Aquí el Camino no termina – se disuelve en el mar.
Pueblos intermedios y particularidades
| Localidad | Distancia desde Olveiroa (km) | Característica | Consejo | 
| Hospital | 2,5 | Desvío Muxía / Fisterra | Última decisión – gira a la izquierda hacia Muxía | 
| Dumbría | 10,0 | Bar, tienda, cajero automático | Buen lugar para desayunar o hacer compras | 
| Trasufre | 14,0 | Aldea tranquila | Breve descanso | 
| Senande | 18,5 | Fuente, tramo sombreado | Pausa para hidratarse | 
| Quintáns | 21,0 | Pequeña iglesia | Lugar sereno para una pausa | 
| Moraime | 29,0 | Iglesia románica, cementerio, mar cercano | Parada fotográfica recomendada | 
| Muxía | 31,0 | Final en el Atlántico | Alojamiento y Santuario da Virxe da Barca | 
Variantes y pequeños desvíos
El Camino sigue en gran parte la carretera principal AC-552, aunque la cruza varias veces – precaución con el tráfico. Un desvío encantador, poco antes de Moraime, lleva por un sendero elevado junto a la costa con la primera vista del Atlántico. Desde Muxía se puede continuar hasta el Santuario da Virxe da Barca (aprox. 1 km) para contemplar la puesta de sol sobre las rocas.
Consejos de equipaje y compras
- Entre Olveiroa y Dumbría apenas hay servicios – lleva provisiones suficientes.
- Imprescindible protección contra la lluvia y el viento: el tiempo cambia con rapidez cerca de la costa.
- En Muxía: supermercado, farmacia, panadería, restaurantes.
- En verano: protección solar, ya que hay largos tramos abiertos.
Comida, alojamiento y servicios
Dumbría, Quintáns y Muxía ofrecen albergues y casas de huéspedes.
En Muxía encontrarás una buena combinación de albergues municipales y privados, algunos situados directamente frente al mar.
Por la tarde los peregrinos se dirigen a la Virxe da Barca.
Aquí, donde el mar golpea las rocas, el Camino termina en silencio.
Muchos simplemente se sientan – en el viento, la sal, la luz.
Lo especial de hoy
Esta etapa no tiene dramatismo – fluye. Desde los campos de Galicia hasta la piedra junto al mar, atraviesa paisaje, no acontecimientos. Muxía recibe de otra manera que Fisterra: no con fuego, sino con agua. Las olas hablan más bajo que el viento del cabo, pero permanecen más tiempo en la memoria. Muxía no es el final – es la respuesta.
Reflexión al final de la etapa
Hoy no has ido al fin del mundo, sino a su borde. El mar en Muxía no pregunta – solo escucha. Quizá esa sea la verdadera calma después del Camino: un lugar que no exige nada y, sin embargo, lo acoge todo.
📊 Resumen tabular
| Etapa | Inicio | Final | Distancia (km) | Desnivel (+/–) | Dificultad | Localidades intermedias | 
| 3b | Olveiroa | Muxía | 31,0 | +510 / –610 | media | Dumbría, Trasufre, Senande, Quintáns, Moraime | 
🌌 Camino de las Estrellas
Olveiroa → Hospital → Dumbría → Trasufre → Senande → Quintáns → Moraime → Muxía
Cuando te sientes sobre las rocas de la Virxe da Barca y el mar rompe bajo tus pies –
deja que hable el viento. Él te dirá más de lo que podrían las palabras.
 
         
        